“…nos ponemos a nosotros mismos y nuestros recursos al servicio de los más necesitados de justicia, capacitando a los sin poder, a los desposeídos, a los marginados, a los que no tienen voz para que trabajen eficazmente por su propio desarrollo y liberación. ”
El riesgo, la colaboración y la asociación caracterizan la respuesta de las RSHM al mundo que las rodea. “Queremos ser mujeres, caminando con los marginados, dando lugar a una globalización desde abajo”. Estas cualidades y el deseo de crear una comunidad de compasión y solidaridad nos han animado a compartir recursos con otros para atender las necesidades de quienes se encuentran en la periferia de la sociedad, especialmente las mujeres y los niños víctimas de la trata, los abusos, el abandono y la falta de vivienda. A través de nuestras relaciones con las Naciones Unidas, la Coalición para Abolir la Esclavitud y la Trata de Personas, Catholic Relief Services, KinderUSA, obras relacionadas con LA Archdiocesan Catholic Charities y el Religious Institutes Impact Fund, nos hemos unido a quienes comparten nuestros valores y nuestro compromiso con nuestro carisma de llevar la vida con dignidad a todos. Al mismo tiempo que se ocupan de las preocupaciones inmediatas de la gente, estas agencias empoderan y permiten a las personas encontrar su voz y un camino para mejorar su desarrollo humano.
